De escapes y fantasía. Mi dinosaurio.


De escapes y fantasía

Me ahogo en tinta. Es espesa y oscura, es fría y espantosa. No sé cómo llegué a este punto en el que la oscuridad me posee y las palabras se disuelven para convertirse en un profundo océano de tinta. Pero estoy segura de que, si quisiera, podría evitarlo. Puedo tener mi propio barco y navegar con seguridad, puedo tomar prevenciones y no dejarme llevar. Sin embargo eso no es lo que quiero. No me conformo con sentarme a la orilla de este enorme charco de tinta. Porque si lo hiciera, no sería lo mismo. No sentiría lo que siento cuando el líquido inunda mis pulmones y me roba el aliento. Ya que si no brincara por voluntad propia dentro de la tinta, nunca tendría la aventura de mi vida. Me quedaría eternamente viendo los años pasar, aceptando lo que me toca ser y vivir, sin correr riesgos que me lleven lejos. Es por eso que todos los días brinco, me rodeo de esa brillante oscuridad y me ahogo en otros mundos. No tengo miedo cuando salto porque sé que voy a volver a estar en la orilla de nuevo. Pero si me aterra saber que no importa las veces que intente escapar, todo va a seguir como siempre… 

¡Qué adictivo es leer un libro! Y que deprimente volver a la realidad…

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NA. Este es un pequeño relato escrito en el nuevo taller que empece. La consigna era escribir sobre mi dinosaurio, ese tormento que aún esta cuando despertamos de nuestro sueño. Basado en el microrrelato de Augusto Monterroso, que les dejo a continuación:

"Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí."

¿Pueden adivinar cual es el dinosaurio de mi historia? (:

Sophie Black

1 comentario:

  1. Carnotauro, quien con sus cuernos pareciera interpretar la peor de nuestras pesadillas.

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Un suspiro del alma... Solo eso te pido...